COMPRAS
Hoy como otros años las gentes se han desbordado a los supermercados, centros comerciales, hasta tienditas y tendejones, de todos los lugares como si fuese el fin del mundo, por doquier compras de pánico, no quiero imaginar en el año próximo entrante por estas fechas, si a ellas le achacamos las predicciones que han dicho algunos del fin del mundo predicho por nuestro ancestros mayas, que tendrá efecto el veintiuno de Diciembre del año dos mil doce, otros ya han explicado que es el fin del calendario maya de el recuento de los cinco mil años que para ellos culminaría en esas fechas, la verdad es que nosotros estamos acostumbrados a dejar para la ultima hora algunas cosas que se pueden hacer con unos días de antelación e ir preparando con tiempo anticipado, las cosas que no son perecederas, como no serán algún día perecederas estas fechas para el mundo Cristiano, donde las celebraciones cobran gran ímpetu, a decir de un buen numero de seres humanos, en especial en nuestro continente llevan al cabo los festejos navideños y de fin de cada año, por decir verdad es una tradición arraigada hasta los más lejanos rinconcitos del mundo cristiano, a lo que aludo en esta reflexión es el echo mal hecho de dejara las cosas para el ultimo momento, donde todo el mundo corre en los almacenes, para comprar regalos, para comprar sus pavos, romerito bacalao y tanta otras cosas que son típicas por estas fechas; por los noticieros me he enterado que no somos los mexicanos los únicos que dejamos todas nuestra compras para lo ultimo, he visto gentes de Europa y Estado Unidos de América en los distintos comercios haciendo compras de ultima hora, se ven las personas como verdaderas hormigas cortadoras, tropezando unas contra otras al ir y venir por las aceras atestadas, buscando esto o lo otro por aquí y por allá, en fin no somos los únicos, cuando va a ser ese día que seamos previsores y, con ello evitar los molestos trompicones con los demás y hasta con los desaguisados que podemos tener con los ¨amigos¨ de lo ajeno que por estas mismas épocas hacen su agosto en diciembre, aprovechan bien la desesperación de los individuos que corren tras su muy preocupante cometido que es comprar de todo y para todos, estos que aplican bien la psicología no tardan en despojar a su mejor presa y desplumarla, como si fuera el mejor pavo para su cena……
JOSÉ MAMUEL
REFORMA, CHIAPAS, MÉXICO
A 24 DE DICIEMBRE DE 2011
Hoy como otros años las gentes se han desbordado a los supermercados, centros comerciales, hasta tienditas y tendejones, de todos los lugares como si fuese el fin del mundo, por doquier compras de pánico, no quiero imaginar en el año próximo entrante por estas fechas, si a ellas le achacamos las predicciones que han dicho algunos del fin del mundo predicho por nuestro ancestros mayas, que tendrá efecto el veintiuno de Diciembre del año dos mil doce, otros ya han explicado que es el fin del calendario maya de el recuento de los cinco mil años que para ellos culminaría en esas fechas, la verdad es que nosotros estamos acostumbrados a dejar para la ultima hora algunas cosas que se pueden hacer con unos días de antelación e ir preparando con tiempo anticipado, las cosas que no son perecederas, como no serán algún día perecederas estas fechas para el mundo Cristiano, donde las celebraciones cobran gran ímpetu, a decir de un buen numero de seres humanos, en especial en nuestro continente llevan al cabo los festejos navideños y de fin de cada año, por decir verdad es una tradición arraigada hasta los más lejanos rinconcitos del mundo cristiano, a lo que aludo en esta reflexión es el echo mal hecho de dejara las cosas para el ultimo momento, donde todo el mundo corre en los almacenes, para comprar regalos, para comprar sus pavos, romerito bacalao y tanta otras cosas que son típicas por estas fechas; por los noticieros me he enterado que no somos los mexicanos los únicos que dejamos todas nuestra compras para lo ultimo, he visto gentes de Europa y Estado Unidos de América en los distintos comercios haciendo compras de ultima hora, se ven las personas como verdaderas hormigas cortadoras, tropezando unas contra otras al ir y venir por las aceras atestadas, buscando esto o lo otro por aquí y por allá, en fin no somos los únicos, cuando va a ser ese día que seamos previsores y, con ello evitar los molestos trompicones con los demás y hasta con los desaguisados que podemos tener con los ¨amigos¨ de lo ajeno que por estas mismas épocas hacen su agosto en diciembre, aprovechan bien la desesperación de los individuos que corren tras su muy preocupante cometido que es comprar de todo y para todos, estos que aplican bien la psicología no tardan en despojar a su mejor presa y desplumarla, como si fuera el mejor pavo para su cena……
JOSÉ MAMUEL
REFORMA, CHIAPAS, MÉXICO
A 24 DE DICIEMBRE DE 2011
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